Crédito de las fotos: Crobar Premiere
La DJ belga desplegó un set electrizante el pasado sábado en The Bow. Bajo una fuerte lluvia que obligó a trasladar la fiesta al interior de la disco, Lens dio cátedra durante tres horas que no tuvieron desperdicio.
Bomba tras bomba. Así se comportó una de las figuras internacionales más representativas del techno actual como lo es Amelie Lens en su presentación en la capital Argentina. Si bien el evento estaba planteado en formato outdoors, las intensas precipitaciones modificaron los planes y The Bow acogió dentro de sus muros a cientos de jóvenes que sacudieron sus cuerpos al ritmo de bombos acelerados y robóticas distorsiones.
Como un moderno ritual de estos tiempos, los clubbers se congregaron en horario vespertino con liturgia de ropas negras, cabellos zigzagueantes y descontrol bailable. En medio de la gran expectativa generada por una nueva visita de Amelie a nuestro país, los fanáticos recibieron un plato de techno bien servido por parte de esa mujer que con oficio repite una y mil veces la misma receta en cada actuación: hacer feliz a la gente.
El warm-up estuvo a cargo de Farrago, un clásico. Compañeros de ruta desde la creación de las fiestas ‘Exhale’ y el sello discográfico Lenske, el DJ y productor sobrepasó de calor la pista a puro hard techno, incluso llegando al límite de pinchar algunos tracks de psy. Tal vez pensado estratégicamente, ese galope de palo y palo se vio recompensado a través de la armonía que devolvió Lens con su aparición frente al público cerca de las 20:00 hs.
Con gestos de una persona que disfruta de lo que hace, Amelie Lens trasmitió desde las bandejas su clásica alegría con sonrisas de disfrute y baile de saltos cortos, un frenesí que recorre el mundo junto a su humilde personalidad encantadora. Con detalles como drops mágicos y mezclas de alta fidelidad, la DJ belga puso orden en la escena dejando las cosas claras y el techno oscuro. Como es su costumbre.