En su primera visita a Argentina, el dj y productor estadounidense Enamour hizo
vibrar el club The Bow en una noche cargada de variedad de sonidos y estilos.
Una noche para sorprenderse fue el juego propuesto el pasado sábado 3 de Agosto en la costanera norte de Buenos Aires. El debut de los tres artistas era el denominador común de la cita, ante la variedad de estilos que conformaron el line up.
Los encargados de recibir al público fueron el dúo Temple Gate, quienes hicieron una cuidadosa tarea para comenzar a mover la pista. El frío era intenso, por lo que Kevin Capasso y Federico Novoa debieron poner en clima a quienes lentamente iban ingresando, con una interesante selección musical que varió entre el deep y el progressive house.
A las 2am llegaría el turno del mítico grupo Klauss, el cual ha comenzado recientemente a explorar el terreno clubber. La cabina lucia atípica repleta de sintetizadores, y desde el primer momento se notó el cambio sonoro, donde comenzaron a aparecer las primeras secuencias ejecutadas por Ernesto Romeo. Una cámara proyectada en la pantalla de fondo permitía espiar un poco entre las muy buenas visuales, lo que sucedía en los teclados.
Sonidos techno y muy progresivos dominaron la potente presentación de Klauss, que se destacó no solo por la calidad del sonido hardware, sino también por la intensidad que sorprendió al público. Noventa minutos de arrolladora sonoridad, pusieron a punto la pista con una propuesta diferente que dejó algunas bocas abiertas y otras desconcertadas.
Entre el mar de sintetizadores apareció Enamour, quien subió dispuesto a tirar toda la carne al asador para una multitud que se había encendido. Llegaba otro momento de la noche donde cada artista dejaría el sello de su estilo. Con una contundente mezcla de tech -progressive – trance, el Dj y productor de Washington arrasó con todo. Aún era mitad de la noche y quedaba mucho tiempo por
delante para desplegar todo su arsenal, el cual fue acomodándose musicalmente durante la primera media hora.
Tracks como Taboo, de su último EP editado recientemente, daban cuenta de lo bien y detallado que conocía su selección musical. Con mucha potencia y energía hizo vibrar a todos y se lo vio muy cómodo en las bandejas, donde acompañaba cada drop agitando sus manos y dedos hacia el público.
Una noche rebosante de diversidad sonora que cautivó a los presentes desde distintos aspectos.