Nos encontramos en una charla virtual con el reconocido músico electrónico Ernesto Romeo, lider de grupo Klauss. Próximo a su presentación en Mutek ES-AR, nos compartió su visión sobre la docencia, la experiencia en pandemia y mucho mas.
EGE: ¿Qué tienen preparado para esta nueva edición de Mutek?
Ernesto Romeo: En esta sesión hicimos hincapié en la textura de lo rítmico, haciendo mucho uso de los sistemas modulares. Ya varias veces hemos incluido sistemas de modulares de distintos tamaños, pero esta vez lleve la versión completa. Durante la tocada me encargue de varios sistemas modulares, algún sinte polifónico, otros pares monofónicos y un Synthi AKS, que lo utilizo mucho para texturas inarmónicas. Luego Pablo Gil se ocupó de las baterías electrónicas, y a la par creó con un sistema modular texturas rítmicas percusivas desde la concepción generativa. También tenia el control de una maquina de bajos, Roland TB 303. Por último, Lucas Romeo se dedicó a tocar la guitarra sumado a otros sintetizadores. Todo esto sincronizado con el BPM de una Roland SBX80. Esta vez nos presentamos en trio, lamentablemente Francisco no se pudo sumar.
EGE: ¿Cómo afectó la pandemia a la dinámica de Klauss?
Ernesto Romeo: Nos afecto mucho, varias de las pocas actividades que realizamos durante este periodo implicaron que no podamos estar los cuatro, por distintos motivos familiares. Previa a la cuarentena nos ha pasado que alguno de nosotros no ha podido coincidir y terminamos tocando de a tres o en formato duo. Es una situación compleja la de hoy en día, no solo existen estas restricciones personales, sino también de los espacios y lugares donde habitualmente tocábamos. Solemos tener una agenda bastante cargada y en este periodo pandémico solo pudimos tocar en Avant Garten cuando la situación no era tan critica. La parte de los conciertos es muy importante para Klauss, desde que se creo el proyecto que para mi el momento del live es lo que lo caracteriza. Si bien en el estudio podemos crear con un nivel de detalle superior, pero en el vivo hay una cuestión energética. A diferencia de los instrumentos tradicionales, en los sintetizadores y maquinas, uno diseña las señales, podes cambiar hasta la forma de lo que suena. No solo la intención o la expresión, podes cambiar directamente la orquestación.
EGE: ¿Qué reglas utilizan a la hora de improvisar en vivo?
Ernesto Romeo: A veces nos proponemos partes o climas, también podemos setear algún BPM o tonalidad, reglas básicas simplemente para estar de acuerdo. Aunque muchas veces no las seguimos y vira para cualquier otra parte. Uno de los miembros de la banda, Francisco Nicosia, tiene audio absoluto, entonces si toco con él, sé que puedo hacer cualquier cosa y él va a hacer capaz de interpretar hacia donde me estoy desplazando tonalmente. Como yo no puedo hacer eso a la inversa y no concibo la música solamente como notas, lo que hago es ocuparme de crear atmosferas y texturas que tengan que ver con lo no tonal. Lo interesante que tiene la textura electrónica es cuan amplio es el panorama para salirte de lo que son las supuestas reglas de lo que se llama música. Un concepto que nos gusta abordar es la idea de la composición en tiempo real. No solo somos nosotros los que proponemos, vamos capturando lo que va pasando y lo transformamos en energía sonora, nos retroalimentamos.
Foto por Gon De Fazio
EGE: Una de las cosas positivas de la pandemia fue el lanzamiento del sello discográfico de tu estudio. Contanos sobre “La Siesta del Fauno Records”
Ernesto Romeo: La idea de “La Siesta del Fauno Records” estuvo vinculada a encontrar un canal de difusión no solo para nuestra música sino también para impulsar y direccionar la música de distintos tipos de artistas. No tiene un género definido ni estética definida, tampoco es necesario haber grabado en el estudio. Es un proyecto libre. La mayor parte de los sellos en los últimos años, sobre todo a partir de la decadencia del formato físico, se han ido especializando más en géneros, y un poco el plan con La Siesta del Fauno es tener otra lógica. Poder encontrar canciones, música experimental o ambient. Varios proyectos propios ya han salido, como un single de Francisco Nicosia, un EP de Lucas Romeo, seguramente yo también este lanzando algo próximamente.
EGE: ¿Tenes pensado lanzar más música como solista?
Ernesto Romeo: Me ha pasado que desde el 90 que grabo música como solista, me gusta hacerlo, pero me cuesta darle más impulso cuando solo estoy yo involucrado. Disfruto más trabajar en grupo o si viene alguien y me pide realizar alguna tarea específica y después se encarga de las otras etapas de producción. Cuando me toca a mi hacer todas estas etapas, siento que pierdo la energía y siempre encuentro otra cosa más interesante para hacer con otra gente. Estoy con ganas de formatear mi agenda para poder dedicarle más tiempo a mis producciones, generar una rutina con una frecuencia semanal.
EGE: ¿Cómo te llevás con la organización del tiempo?
Ernesto Romeo: Soy malísimo organizando mis tiempos. No solamente es el tocar o el grabar, sino que también es grabar y producir para otra gente. Estudiar los instrumentos, re estudiar los instrumentos, porque las perspectivas de uno cambian mucho. Teniendo tantos equipos por explorar y sus posibilidades infinitas, necesitaría 14 vidas más para poder hacer todo lo que me gustaría. Pero no me preocupa tanto, hago lo que puedo y lo disfruto.
EGE: ¿Sentis que tu rol como docente te exige estar actualizado?
Ernesto Romeo: Es importante tener en cuenta las cosas que van pasando en la actualidad, pero diría que más que estar actualizado, la clave esta en transitar varias veces las bases fundamentales, los inicios. En nuestra cultura todo es muy aditivo, como si fuera una línea que va en una sola dirección, pocas veces se vuelve a estudiar de cero. La docencia y el hecho de explicar muchas veces ciertos temas, me hace cambiar todo el tiempo la perspectiva y me entusiasma enormemente.
EGE: Fuera de lo musical ¿qué te gustaría aprender?
Ernesto Romeo: Siento que estoy aprendiendo de todo constantemente, desde leer la etiqueta de una botella de agua hasta leer cualquier cosa en Wikipedia. Hasta el ultimo momento de mi vida voy a estar aprendiendo, no necesariamente algo en particular. Viajo, voy a museos, compro libros, estudio la obra de distintos artistas, he ido a ciudades especialmente para conocer algunas obras, en su momento me paso mucho con Van Gogh. No porque quiera ser pintor o escribir algún ensayo, sino por el apasionamiento que te produce el conocimiento. Me interesa ampliar la visión y no tanto el perfeccionamiento en una determinada área.
EGE: ¿Indagaste en la luthería experimental?
Ernesto Romeo: No me he metido mucho en ese mundo. Si trabaje en colaboración con la gente de sistemas modulares núcleo, con Gs Music, incluso en procesadores. También participe con marcas de afuera como Arturia, recientemente en el lanzamiento del PolyBrute. Siempre del lado de mi experiencia como musico y docente, ayudando a que sean más didácticos y funcionales.
EGE: Por último ¿Qué artistas de la escena local te están llamando la atención?
Ernesto Romeo: En la época que no era musico o que recién estaba empezando, le dedicaba mucho tiempo a descubrir música nueva. Pero a medida que fui haciendo deje de tener tiempo para curiosear, y por lo general escucho música por recomendación. Últimamente estoy muy interesado en la música más textural, esto se debe a que hace poco estoy trabajando con un sistema modular Buchla, el cual esta más centrado a la composición por estructuras evolutivas, lo generativo, más que el tocar teclas. Destaco a artistas como Ariel Raguet o Agustin Aguirre, que trabajan con el concepto de la evolución textural y la presencia de lo aleatorio.
Este tipo de música tiene un grado de libertad que puede vincularse o no a la música tradicional que está buenísimo. Atrae a gente que nunca estudio y tal vez ni le interesa la teoría musical o la performática de un instrumento. El acercamiento a un modular es distinto, es conectar cables y mover perillas, no requiere una habilidad particular. A diferencia de un instrumento tradicional como la flauta traversa o un oboe, que la interfaz de alguna manera te interpela. La música electrónica vierte lo creativo desde un punto de vista más sónico y no tanto si tocas bien el piano o si sos virtuoso tocando la batería. Si la única manera de hacer música es dominando ese tipo de interfaces complejas, termina siendo restrictivo.
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