Una noche fría en la ciudad de Buenos Aires fue la antesala perfecta para acuñar al show más caliente de los últimos tiempos. Justice, el dúo francés conformado por Gaspard Augé y Xavier de Rosnay, demostró el pasado jueves 3 de abril de 2025, en el Movistar Arena, que su sonido sigue siendo una fuerza vital en la escena de la música electrónica global.
Crédito de las fotos: LA. TEAM
La propuesta que conforma su gira Justice: Live no se limitó a interpretar clásicos; los franceses regalaron 90 minutos de un gran mashup incesante en el que su estilo lujoso, picante, y saturado se hizo sentir. Interpretaron desde algunos de los himnos de su álbum debut “†” como “DVNO”, “D.A.N.C.E.” y “Stress”, hasta el material más reciente de su último disco “Hyperdrama”. La selección musical fue impecable y arrastró al público a revelarse eufórico entre cada beat.
El espectáculo visual fue un componente esencial de la noche. El set design es una creación de Vincent Lerisson, ideada específicamente para la gira y armada alrededor de una pantalla grande giratoria. Es una obra que llevó un año y medio en consolidarse e incluye once toneladas de luces y motores cinéticos en estructuras.
La experiencia se completó gracias a la excepcional calidad del sonido durante la presentación de Justice que fue innegablemente atribuible a la pericia del equipo técnico a cargo. Su dedicación y dominio en la manipulación del equipamiento del Movistar Arena, aseguraron una experiencia auditiva nítida y envolvente, permitiendo que la complejidad y potencia de la música del grupo se apreciara en su totalidad.
La puesta en escena en estrecha sintonía con el dúo, garantizó una experiencia compleja y enriquecedora, fiel al estilo del duo francés, convirtiendo al venue en un espacio fuera de tiempo en el que el público se sumió en una experiencia audiovisual arrolladora.
No obstante, más allá de la impecable ejecución técnica y la cuidada producción, el recital atravesó los límites y se vivió como un ritual. Una celebración colectiva de la música electrónica, un espacio donde miles de almas se conectaron. La energía del público, fue la prueba irrefutable de que siguen siendo un faro para los amantes del electro en todo el mundo. El concierto dejó un recuerdo imborrable y reafirmó la posición de Justice como uno de los nombres más influyentes en la historia de la música electrónica contemporánea.