Con su segunda presentación en Argentina en menos de un año, Jolk levantó una vez más el estandarte del buen techno melódico en nuestro país ante una multitud convocada en Crobar.
Crédito Foto: Crobar / BAN Talent
Con el fin del verano 2023, uno de los más agobiantes de la historia de Argentina, la temporada de eventos en Capital Federal encendió todo su voltaje, ese que la caracteriza por tener una de las agendas más nutridas de la región. En ese marco, Stephan Jolk desembarcó en Crobar para zarandear a un buen número de jóvenes que se dieron cita en Palermo el pasado viernes. A pocos meses de su ultimo show en The Bow, el artista de Afterlife sacó credencial de habitué y terminó de sellar su romance con el público porteño, que le bailó hasta el último track de madrugada.
Algunos lo ubican como alemán, otros como italiano. Lo cierto es que Jolk ya representa a un trotamundos que desde hace años convida techno melódico entrelazado con fuertes ráfagas de house en distintas partes del globo, haciendo crecer cada vez más su figura y fidelizando fanáticos a fuerza de contundentes presentaciones. Una síntesis de ese proceso se pudo apreciar el último fin de semana en la reconocida disco argentina.
En medio de la noche calurosa, las potentes melodías del artista atrajeron como un imán a los clubers que aún permanecían dispersos por el patio y otras áreas comunes de la sala. Antes, el local John Cosani entretuvo a la masa con un enérgico set ofrecido apenas algunas horas después de haberse presentado en el festival Lollapalooza. La mezcla de estilos funcionó a la perfección y el cambió de manos en la bandeja fue percibido como un desenlace natural del relato entonado por Cosani. Y allí comenzó la danza de Stephan Jolk.
Con toda la energía de un DJ y productor joven que rápidamente está descollando en la escena mundial, Jolk no demoró en hacer sentir su avasallador sonido de golpes acelerados y melodías sintetizadas. No solo adscripto al sello comandado por Tale Of Us, su pertenencia a labels como Beatfreak Recordings y Natura Viva Black son muestras de su versatilidad. Bajo los nuevos cuerpos de visuales estrenados por Crobar en su pista -unos rieles lumínicos que parecen simular en espejo a las vías del tren San Martín que pasa por encima de la disco-, Stephan volvió a generar felicidad a través de su música obteniendo como recompensa un apasionado baile frenético.